Antes de nada, creo que es de recibo agradecer a quien corresponde, el que yo os pueda escribir y contar todo esto, ya que, sin ellos, nada de ello seria posible. Manel, Dario y Eleazar, creo que sabéis de sobra lo que significa, el mero hecho de poder compartir unos lances con vosotros, más aun, sabiendo como estaba el tema, ya que, seguro que os hubierais quedado en cama, de no ser por nuestra visita. ¡Gracias compañeros!
La verdad, la cosa no pintaba nada bien, las previsiones eran de Mar del noroeste de hasta 4 metros, con viento del norte y lluvia el Sabado, y algo menos de Mar para el Domingo, aunque no mucho menos.
El hecho de tener que fijar una fecha concreta de antemano para poder cuadrar los tres integrantes del "trip"(Marcos, Beñat y el que suscribe), hizo que las condiciones tanto del Mar y metereologicas fuera una autentica lotería. Al final, se confirmaron los peores augurios, pero tengo que reconocer, que a la hora de pescar, el tiempo nos respeto bastante. El fuerte oleaje tampoco fue impedimento para poder pescar, aunque gran "culpa" de ello, la tuvieron nuestros guías.
Ya desde el viaje de ida, tuvimos como "fiel acompañante" a la lluvia:
Una vez instalados cómodamente en nuestro apartamento, recibimos la visita de Manel y planificamos la primera jornada, las cosas pintaban mejor a pesar de las previsiones.
El plan era observar el Mar al amanecer y decidirnos por una zona de abrigo, al resguardo del fuerte Mar de fondo y del viento.
No obstante, al siguiente día con la primeras luces, confirmamos que la "cosa" iba a estar dura de verdad. Fuerte viento de cara con un Mar imponente y tormentas de lluvia era lo que nos esperaba.
Al final, Manel decidió bajar a una calita resguardada del mar del Noroeste, después de descartar alguna otra por el camino, aunque más por "despiste" que por descarte, jeje..
Estaba practicable, aunque en este caso, los "chivos" iban a resultar imprescindibles y como no, "algo" adecuado para poder lanzarlos.
Yo en mi caso, me hice con los servicios de una Cinetic Black Sea Bass 3,30 metros CW: 40-120, para esta visita, aunque, desde luego, vistas las sensaciones que he tenido, intentare sacarle partido también este invierno, ya lo creo.
Me llevo grato recuerdo de este primer escenario en el que pescamos, ya que, además de estrenar la vara con una Roballiza Asturiana, lo hice con un "chivo"( Delta 50 gramos blanco). Otro reto conseguido, que aunque parezca una "chorrada", me hace especial ilusión. Además, en un "micro-punto" al que desde arriba eché el ojo antes de bajar, ya que, cogía un poco mas de calado y la corriente no era tan fuerte, hice bien en intentarlo allí, ya que, dio la única de toda la mañana. C&S
Después de insistir y dar unos cuantos varazos más por la zona, decidimos "plegar" e ir a sacar unas fotos a la "Playa del silencio", un enclave precioso, que tenia muchas ganas de visitar, para posteriormente hacer unas compras e ir picar algo.
Y eso es lo que dio de si el Sabado en el roquedo. A la tarde nos lo tomamos con más calma e hicimos un poco de turismo por Luarca , también probamos algunos microvinilos y señuelos en el puerto. Al día siguiente, aun quedaba otra dura jornada de pesca. También saludamos a Tino, que se paso por el puerto a hacernos una visita, un placer por cierto.
El Domingo, nos acompañarían Dario y su cuñado Eleazar. Las risas estaban aseguradas y además conocían una bonita zona al resguardo del Mar, una calita muy curiosa al mas puro estilo "Ibizenco", pero aquí, en nuestro Cantabrico.
La zona también estaba al abrigo del potente mar de fondo que todavía reinaba, aunque allí, se mantenía en muy buenas condiciones para la pesca. Algunas pequeñas Roballizas dieron la cara con los vinilos y alguna otra que se dio a la fuga (ver vídeo).
Un lujo poder disfrutar de esta costa en tan buena compañía y con alguna que otra captura.

Va por vosotros... ¡paisanus!