No me lo puso nada fácil, es más, reconozco que el "factor suerte", estuvo de mi lado a la hora de cobrarla.
Supongo, que mi dosis de "mala suerte", se agotó esa misma mañana, con la perdida de una buena pieza, que nada más tomar el señuelo, pegó una arrancada increíble, para posteriormente soltarse, sin más.
En este caso, no tuve nada que hacer, más que cambiar los triples del Makina por unos más grandes (Daiichi Nº 2), para evitar de nuevo tales circunstancias. A la tarde lo volví a intentar.
El Mar subió bastante por la tarde, las grandes mareas se notaban considerablemente, dado el elevado coeficiente causado por la "Súper-luna". La mayor parte del tiempo, estuve echando Chivos de 50 gramos y Cucharas ondulantes de 40 gramos con mi Ilicium de 2,70 metros H, 20-40. No estaba para menos.
Ya a última hora, con las últimas luces, volví al micropunto de la mañana, y a pesar de no albergar muchas esperanzas, calzé un Makina de YKR en la grapa (el mismo de la mañana) y me decidí a pegar los últimos lances, la verdad que, las condiciones eran ideales, no se podía pedir mucho más.
En el tercer lance, a media recogida, parada en seco... que respondo con un enérgico cachete, confirmando que es buena. No me corto, le meto otro par de cachetes, para asegurar la clavada.
Supongo que le dolió bastante, no saca hilo, pero la vara marca una curva interesante y el escenario no me permite demasiadas confianzas, empiezo a bombear sin contemplaciónes. Procuro sacarla a la superficie e intentar hacerme con la situación. Se va acercando a la orilla y yo también he de adelantarme, ya que, se ha escorado a la izquierda y tengo bastantes piedras delante de mi posición.
Viene una ola, pero no la termino de aprovechar y no consigo remontar la pieza por una de las piedras que he de salvar, pese a poner la Ilicium al límite. La posterior resaca, pone en peligro todo el lance y he de adelantarme y bajar la vara para no reventar todo. Con otra pequeña ola, la vara conoce sus límites otra vez y en esta ocasión, salvo el primer escollo.
A partir de aquí todo se descontrola, viene una ola de la serie y barre toda la orilla, tengo suerte y me la mete en una poza. Me acerco para echarle mano, pero me doy cuenta de que viene una ola aun mayor que la primera. Me precipito, y tiro del bajo....!Mala idea¡, este, se parte, en el mismo momento que la ola barre la orilla con violencia...a tomar por ***!!!!!
En ese momento, di todo por perdido, y mi reacción fue,.... (Imaginarosla vosotros).
Cual fue mi sorpresa, que trás unos segundos, al retirarse la ola, me di cuenta de que la Lubina, permanecía aun, en una de las pozas colindantes. A pesar de cubrirme hasta las rodillas, me abalancé sobre ella sin pensármelo, no la iba a dejar escapar otra vez. Fué un tanto surrealista perseguirla en medio de la oscuridad, mientras las olas batían y me salpicaban encima. Tras la "persecución" me hice con ella, arrinconandola en una esquina. (No había mas peligro, que un posible remojón por las olas)
Supongo, que el grito que pegué una vez aseguré la captura, se escucharía a varios kilómetros.
Tengo que reconocer, que tengo el vídeo completo del lance, pero de momento no lo voy a publicar. A pesar de que se aprecia muy bien todos los detalles, que os he narrado en la entrada, también se aprecia su ubicación y no quiero dar demasiadas pistas, ya que, no me esperaba tales resultados, en tan poco tiempo, pescando en este coto.
Aunque si tengo un pequeño vídeo de ella fuera del agua, en el que se aprecia su porte. (para los desconfiados)